domingo, 29 de abril de 2018

Voy a intentar abandonar Facebook

Esta red social es muy adictiva y me hace perder mucho tiempo. Un comentario, un "me gusta" dado por alguien, hace que se excite mi curiosidad y pierda un tiempo en satisfacerla. Pero esa es una de tantas, la peor, para mí, es la servidumbre de la buena educación: el querer animar, recompensar a la gente con un comentario, el apreciar, el buscar cosas nuevas, revisar mis archivos de fotos para ser original, para aportar.

Lidero un grupo llamado "Por las nubes": es como un mundo ideal de gente que no compite de manera insana, sino que trata de ofrecer lo mejor para los que lo ven; no ha habido casi roces en él a diferencia de cualquier otro. Yo soy alguien maduro, tengo un poco de experiencia y le dedico tiempo y amor, altruistamente, o (egoístamente, porque me gusta que me quieran). Así ha funcionado cuatro años. He descubierto gente con mucha sensibilidad y no poco arte, que me cae muy bien y que nunca conoceré personalmente. Me siento ligado a muchos, responsable del grupo, de que funcione, de que interactúe; y me doy a ello.
https://www.facebook.com/groups/323199044540737/

Pero quiero concederme una oportunidad como escritor y necesito ese tiempo. Con cincuenta y tres años y todo lo que he vivido, pensado, leído... tengo que probarme otra vez, intentar hacer una obra como las de los escritores que admiro. No me valdrá decirme: he estado animado, pendiente, alimentando un grupo muy majo que me quiere y produce grandes fotografías, cada vez mejores y más trabajadas, porque todos aprendemos de todos... y se me ha pasado el arroz de escritor.

Ya he desactivado y me he borrado de todo lo demás de Facebook para que no me dé problemas, solo me queda este querido grupo. Me gustaría dejarlo en buenas manos, para que las personas que lo disfrutan y se motivan a hacer mejores fotos con él, lo sigan haciendo, si quieren. Es mi criatura y no me gustaría matarla.

Porque, en el fondo, quiero a la gente. De eso se aprovechan los directivos y los accionistas de Facebook; de que queremos afecto, reconocimiento, juego, vida, y nos proporcionan un solar en el ciberespacio para que juguemos en él. A cambio trafican con nuestros datos y los hacemos ricos y poderosos. Ésta ya sería una buena razón para dejarlo.

Muchos fumadores o bebedores decían "lo puedo dejar cuando quiera" "lo que pasa es que no quiero". No lo podemos dejar tan fácilmente, es una adicción, y no es de las peores, tiene sus lados buenos: pero supongo que hasta la heroína tiene sus lados buenos.

Quiero independizarme, ser libre. Aunque no me borraré del todo porque me puede seguir interesando puntualmente. Con algunas personas solo me he comunicado por Facebook, por ejemplo un viejo amigo y compañero de piso de estudiante. Además en mi trabajo del juzgado me es útil teclear un nombre y saber a quien me voy a "enfrentar"; es útil.
Puede que sea un pretexto para no dejarlo del todo. A lo mejor me estoy engañando y así no escaparé nunca de esta adicción que he reconocido. Por ejemplo, a mí, ni a casi nadie,  nos fue posible restringir el fumar a un par de cigarrillos- Tuvimos que ser radicales; y ya llevo veintiocho años sin fumar, nunca, nada... puedo presumir que sé como vencer esa adicción.

Es una apuesta. Voy a tratar de ser inteligente y mirar por mí. Eso es todo.

7 comentarios:

  1. La vida son ciclos , un ciclo se cierra otro se abre....Hay que ser inteligentes emocionalmente, antes nos enseñaban sobre todo a las mujeres, que primero eran los demás, pues no primero es uno porque si no cumplimos nuestros sueños, no realizamos nuestros dones nunca estaremos bien y si uno esta bien es cuando puede ayudar a los demás.
    Tienes razón el grupo de las nubes, es un grupo especial,respetuoso, alegre, familiar, de estar o sentirte como en casa,natural, donde grandes fotógrafos participan sin egoísmo y mostrándose lo grande que son. En este grupo conocí gente estupenda , que si llegarla a conocer en persona solo atreves de Facebook es como si los conociera de verdad en persona, también a gente que conociéndolos en persona quizás nunca habría tenido una conversación y con otros que quizás había hablado me mostraron mas como son.
    Te deseo lo mejor en tu nueva etapa de escritor que no tengo duda que lo haces muy bien, nunca dejes de escribir es un gran don que tu tienes, que envidia me das.
    Un gran abrazo.

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    1. Muchas gracias, Conchi; eres un sol de inteligencia, de ánimo, de comprensión y de mesura. En estos cuatro años nunca he visto ningún momento malo, ningún desliz en el que hayas dejado de serlo.

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  3. En las redes las potenciales formaciones de subgrupos de intercomunicación crecen muy por encima del crecimiento del número N de usuarios. La ley de David Reed formuló esos subgrupos de comunicación posibles: N usuarios pueden formar tantos subgrupos diferentes como (2 elevado a N) - N - 1. Esto sucede en la vida real como en la virtual.
    2 usuarios: (2^2) - 2 - 1 = 1 grupo de comunicación.
    3 usuarios: (2^3) - 3 - 1 = 4 subgrupos posibles.
    10 usuarios: (2^10) -10 -1 = 1013 subgrupos posibles.
    100 usuarios: (2^100) [1,2676506 × 10^30] - 100 - 1 = excede los dígitos de una calculadora normal, tiende a infinito. Obsérvese que con solo 10 usuarios las interconexiones de pares posibles son más de 1000.
    Se sabe que el exceso de información puede angustiar o deprimir al ser humano, que, en la Historia, hasta hace poco no contaba con más información que la relativamente cercana. Las máquinas, servidores y cables podrán aguantar en interconexión hacia el infinito, más o menos según la financiación de la red; pero, en esta intercomunicación generalizada con crecimiento exponencial, la capacidad comunicativa del ser humano (que es emocional) es inferior a la potencialidad de interconexión de una red como Facebook, creciente hacia lo inabarcable.
    Por esto, también se observa en Facebook una manifestación del carácter psicosocial de nuestras amistades: quienes emiten muchas publicaciones seguidas, no suelen interactuar, no dialogan, en realidad permanecen aislados, solo emiten. Ahí reside la diferencia de forma y fondo entre informar y comunicarse. Emitir es más simple, comunicarse implica activar más el cerebro, ejercitar empatía, mover más hormonas y enzimas neuronales, fatigarse. Quien solo informa y no es receptor, no hace más que ejercitar su ego. Quien se comunica puede destrozarse a sí mismo. Imaginemos un local, por ejemplo un bar, con 100 personas en las que todos podemos hablar con todos a la vez. Esa imposible jaula de grillos es la Red

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  4. No llevo demasiado tiempo en el grupo pero desde el principio me sentí como en familia. Agradezco a todos la buena acogida q tuve y sobre todo a ti Juan por dejarme pertenecer a él. Siento q t vayas pero es comprensible y t deseo todo lo mejor. Mucha suerte!!!

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    1. Una decisión muy inteligente, que apoyo y admiro. Tal vez algún día pueda yo dar el mismo paso. De momento estoy enganchado hasta el límite. Te tomo la palabra, quiero leer y disfrutar en breve una novela tuya. Un abrazo.

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  5. Gracias a todos los comentaristas. Nací en los años 60 y en los primeros cuarenta y cinco años de vida me aficioné al campo, a la amistad en directo, al sexo, a la literatura, a la música, al cine, al teatro sigo practicando todo esto conscientemente y buscando tiempo para dedicarlo aún más. Tengo cientos de libros y partituras que adquirí y debería hacer justicia. Sin embargo me encuentro que todos los días entro en esa página azul y felicito, comento, observo, cotilleo, apruebo y desapruebo, cosas que nunca deseé hacer: me entretengo y la vida se va. Que se vaya, ya que ha de irse, por donde siempre he querido, donde racionalmente admito y no perdida en esas pequeñas trampas de atención y de adicción. Sé que ser tajante implica ser un poco injusto, porque en esa página hay pequeñas cosas que alimentan, pero añaden engatusadora glucosa y entorpecedor colesterol.

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